Por revistaeyn.com
El saldo de los créditos de consumo otorgados por los bancos con licencia general en Panamá ha registrado un crecimiento sostenido del 4.43 % alcanzando un total de US$13,948 millones, según el Informe de Actividad Bancaria (IAB), a julio de 2024, emitido por la Superintendencia de Bancos de Panamá (SBP).
Este incremento, equivale a US$592 millones más que en el mismo período del año anterior.
Por su parte, la cartera de depósitos del Sistema Bancario Nacional (SBN) creció un 4.41 %, alcanzando US$92,917 millones, lo que representa un aumento de US$3,925 millones en comparación con el mismo período de 2023.
Los activos totales del Sistema Bancario Nacional (SBN) sumaron US$131,864 millones, lo que representa un incremento del 4.21 % o US$5,323 millones más respecto al año anterior.
"Este crecimiento se debe en gran medida al comportamiento positivo de la cartera crediticia, que representa el 21 % de los activos totales", reporta la SBP.
NUEVOS CRÉDITOS
La cartera de crédito neta del SBN totalizó US$84,553 millones, reflejando un aumento de US$6,030 millones o 7.68 % en comparación con el año pasado. Además, los créditos nuevos desembolsados alcanzaron US$124,532 millones, lo que representa un incremento del 13.4 % en los flujos de crédito.
"Estos resultados sugieren un mayor nivel de confianza tanto de parte de los mercados internacionales como del entorno local con el inicio de la nueva administración gubernamental", dice el informe.
Este efecto positivo parece trasladarse al ámbito financiero, donde las condiciones para el otorgamiento de crédito se mantienen estables.
Además, al cierre de julio de 2024, el Centro Bancario Internacional de Panamá (CBI) los activos totales alcanzaron los US$147,851 millones, lo que representa un incremento interanual de US$4,486 millones o un 3.1 %. Este crecimiento se deriva principalmente de una estrategia de optimización del retorno sobre activos productivos, así como de una gestión activa y estratégica de los recursos disponibles.
La expansión en el balance del CBI refleja una aceleración en el crecimiento de los activos productivos, impulsada en gran medida por un aumento del 7.5 % en la cartera de créditos neta, que ha alcanzado los US$92,095 millones, y un incremento del 5.64% en inversiones en valores. En contraste, los activos líquidos se redujeron un 17.4%, indicando una estrategia de reasignación hacia activos de mayor rendimiento.
