Por revistaeyn.com
La “revolución de la recualificación”. Es un término apropiado para uno de los avances más rápidos de la actualidad. Por eso, es gratificante ver tanta urgencia en torno a la capacitación, ya que se prevé que la inteligencia artificial (IA) generativa tendrá un enorme impacto en el lugar de trabajo. Un estudio de Cognizant concluye que la tecnología transformará el 90 % de los puestos de trabajo en la próxima década.
Capacitar a los trabajadores para participar en la prosperidad prometida por la tecnología avanzada es un primer paso vital para garantizar que la IA generativa cumpla su potencial.
En las pasadas transiciones generalizadas de la fuerza laboral, los empleadores a menudo se enfocaban en las mejores oportunidades que disfrutarían los futuros trabajadores. La implicación era que los trabajadores actuales podrían quedarse obsoletos. Hoy, las organizaciones deben centrarse tanto en recualificar su fuerza laboral existente como en aprovechar nuevas fuentes de talento y poner a los futuros trabajadores en el camino de beneficiarse de las oportunidades en la era de la IA generativa.
La escasez de trabajadores requiere que las organizaciones piensen de forma creativa para maximizar el impacto y el alcance de sus programas de capacitación en IA generativa. Las empresas deberían considerar hacer lo siguiente para abrir puertas al talento actual y potencial.
Formar consorcios centrados en producir trabajadores capacitados en IA. Los consorcios -como la Automotive Skills Alliance de la Unión Europea, financiada por las partes interesadas, incluidos los fabricantes de automóviles- pueden impulsar a todo el sector. Incluso en el competitivo mundo de los negocios, los beneficios de una colaboración de este tipo son valiosos, incluyendo los gastos compartidos y un plan de estudios centrado.
Explorar los grupos sin ánimo de lucro como posibles socios de capacitación. A menudo, las organizaciones sin ánimo de lucro pueden poner en contacto a las empresas con talentos subrepresentados en la fuerza laboral del conocimiento.
Aliarse en colaboraciones académicas. Las escuelas secundarias, los centros de formación superior y las universidades tradicionales de cuatro años tienen interés en el éxito de la recualificación y, por tanto, un papel que desempeñar. Los programas de microcredenciales, creados por colaboraciones entre empresas y universidades, ya ofrecen vías asequibles de reciclaje y mejora de las cualificaciones.
La recualificación técnica es solo un aspecto, aunque crítico, de equipar al talento para el futuro. Entre otras cosas, las organizaciones deben abordar la ansiedad de los trabajadores por encajar en este nuevo mundo mientras los equipamos para formar parte de él. Esto incluye proporcionarles todas las habilidades que necesitan para tener éxito, no solo las requeridas por los últimos avances tecnológicos.
