Por AFP

La activista de los derechos humanos Bianca Jagger acusó este martes al presidente nicaragüense Daniel Ortega de dirigir 'una guerra sucia' contra los participantes de una ola de protestas, que ha dejado más de 80 muertos desde abril pasado.

'Aquí lo que tenemos es una guerra sucia' contra estudiantes y una población civil desarmada. 'Aquí no tenemos una revolución sandinista, tenemos una demanda cívica' de justicia y democracia, dijo Jagger en rueda de prensa en Managua.

Visiblemente conmovida, Jagger dijo que el gobierno de Ortega 'está matando (a los jóvenes) como perros' con fuerzas antimotines que están 'preparados como en una guerra'.

La activista participó en la presentación de un informe de Amnistía Internacional (AI) que documenta la violencia y el uso de grupos paramilitares afines al gobierno contra las protestas que sacuden a Nicaragua desde el 18 de abril.

'El momento ha llegado para que pidamos y obtengamos justicia (...) la única solución que existe para Nicaragua es que Daniel Ortega y Rosario Murillo se vayan', advirtió.

Jagger y la directora para las Américas de Amnistía Internacional (AI), Ericka Guevara-Rosas, fueron testigos el lunes de un ataque de grupos de choque pro-gubernamentales contra estudiantes que protestaban en la Universidad de Ingeniería.

'Escuchamos morteros, (disparos de) bala y luego (vimos a) miembros de la población que llegaron a ayudar a los estudiantes en motocicletas', relato Jagger.

Uso de paramilitares

El informe de AI señala que 'el gobierno nicaragüense ha utilizado grupos armados o parapoliciales' que actúan en coordinación con las autoridades para reprimir en ocasiones de manera 'letal'.

Alerta, además, que el gobierno no solo ha recurrido a la 'fuerza excesiva' para disolver a los manifestantes opositores, 'sino que posiblemente llevó a cabo ejecuciones extrajudiciales con la participación de grupos parapoliciales'.

Las protestas estallaron en abril contra una reforma al seguro social. Tras ser sofocadas con violencia por la policía, desencadenaron movilizaciones masivas de repudio al gobierno.

'Presidente Ortega, aunque usted nos reprima y persiga nosotros vamos a seguir en las calles', advirtió en un video difundido en internet uno de los líderes estudiantiles, Lesther Alemán.

Los estudiantes demandan justicia y democratización y la salida anticipada de Ortega del poder que ostenta en Nicaragua desde 2007.

'¡Los queremos vivos!'

En tanto, varias madres se concentraron este martes frente a la cárcel El Chipote, en Managua, para exigir la liberación de sus hijos detenidos por participar en las protestas.

Unas lloraban, otras rezaban, gritaban o suplicaban a los policías que custodiaban el portón que les entregaran a sus hijos, al tiempo que comparaban a Ortega con el exdictador Anastasio Somoza, último descendiente de una dinastía que fue derrocada en 1979.

'¡Los queremos vivos!', reclamaron las madres.

'Tengo un dolor muy grande, encerrar a un hijo es lo peor que puede pasar', dijo Zoila Navas, madre de un universitario.

Después de varias horas de presión, un grupo de sacerdotes logró que la policía liberara a 22 jóvenes.

La policía por su lado denunció este martes que una docena de negocios fueron saqueados por delincuentes en la sureña ciudad de Masaya y que la sede de una unidad policial fue quemada en un barrio de la capital.

La vicepresidenta Murillo dijo que la violencia que impera en el país no abona al clima adecuado para el desarrollo del diálogo que han decidido retomar con la oposición para buscar una salida a la crisis, pero tampoco anunció que se retirarán.

Los obispos católicos tienen previsto anunciar próximamente la fecha en que se reanudará el diálogo nacional, luego que las partes resolvieran el lunes incluir en su agenda la democratización del país.